En su primer informe al país, el presidente de la República, José Raúl Mulino, anunció este 2 de enero de 2025 un plan para reducir los precios de las medicinas en Panamá. Como parte de esta iniciativa, solicitó al ministro de Salud, Fernando Boyd Galindo, que, durante este mes, se pongan a disposición de las farmacias las 20 medicinas más utilizadas con un descuento significativo, pero no precisó el porcentaje de descuento.
El presidente Mulino destacó que, para asegurar este descuento, se tomará una medida sin precedentes: los medicamentos aprobados por la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos) y la EMA (Agencia Europea de Medicamentos) recibirán un registro sanitario automático e inmediato en el país.
Además, Mulino se comprometió a acabar con lo que calificó como “la mafia de la medicina” dentro de la Dirección Nacional de Farmacia y Drogas. En un mensaje claro a los funcionarios, el presidente indicó que aquellos que deseen seguir sirviendo a unos pocos distribuidores privados deberán renunciar y unirse al sector privado. “Si no están dispuestos a trabajar para los 4 millones de panameños que necesitan medicamentos baratos y disponibles, que se vayan”, afirmó.
Este enfoque busca incentivar la competencia en el sector farmacéutico, lo que debería llevar a una disminución de los precios y a un beneficio generalizado para la población.
Mulino añadió que, si los distribuidores no venden medicamentos a precios adecuados a la CSS (Caja de Seguro Social) y al Minsa (Ministerio de Salud), se procederá con la importación directa de estos productos.
El tema de los medicamentos ha sido objeto de análisis por parte de diversos sectores durante años, con el fin de acabar con el desabastecimiento en el sector público y abaratar los precios en el mercado local.
De hecho, la pasada administración aprobó un descuento del 30% en el precio de al menos 900 moléculas de medicamentos, lo cual fue una propuesta que surgió de la mesa técnica de medicamentos presidida por el expresidente de la República, José Gabriel Carrizo.
Posición sobre el anuncio de Mulino
Según una fuente de la Asociación Panameña de Distribuidores de Medicamentos e Insumos (Aredis), desde que Mulino era candidato, se han ofrecido para aclarar los malentendidos que circulan en la imaginación de mucha gente y sugerir medidas puntuales. “Si el diagnóstico no es correcto, las medidas que se tomen no serán las adecuadas”, acotó.
Respecto al registro automático de productos recientemente aprobados por la EMA o la FDA, consideró que es una buena medida, pero destacó que los registros son realizados por los fabricantes, no por los distribuidores. Además, enfatizó que Farmacia y Drogas es una agencia compuesta por funcionarios muy serios, en la que no existe influencia indebida.
Por su parte, Enma Pinzón, presidenta de la Federación de Enfermedades Crónicas, Críticas y Degenerativas de Panamá (Fenaeccd), agradeció el gran interés del presidente de la República en mejorar los precios de los medicamentos, una medida que consideran positiva para la población. Tal como han manifestado en otras ocasiones, la mejor forma de lograr una reducción efectiva es a través de las farmacias de los centros de salud, que deben contar con suficientes medicamentos para vender a todos los pacientes que lleguen con recetas médicas, expresó Pinzón.
Los precios que el Estado paga por los medicamentos son insuperables y tienen el potencial de transferir ese gran ahorro directamente a la población. Un ejemplo claro de esto es el precio de la insulina, que en las farmacias privadas cuesta alrededor de $50, mientras que en los centros de salud se reduce a solo $3. Sin embargo, este tipo de ahorro no se podrá lograr si el presupuesto otorgado al Ministerio de Salud para la compra de medicamentos sigue siendo tan bajo.
En cuanto a los medicamentos aprobados por la FDA y la EMA, Pinzón subrayó que estos cuentan con un procedimiento abreviado para obtener su registro sanitario en Panamá, el cual no debería demorar más de 15 días, siempre que se presenten los estudios de estabilidad para la zona climática de Panamá, que es una de las más severas del mundo debido a su alta temperatura y humedad.
Como pacientes, no tenemos inconvenientes con el proceso abreviado que el presidente de la República desea implementar, siempre y cuando no implique desmejorar la calidad de los medicamentos que entran al país, concluyó Pinzón.
