El primer Banco de Leche Humana, ubicado en la Fundación Lucy Tzanetatos y que forma parte del Hospital del Niño, Dr. José Renán Esquivel, fue inaugurado ayer, 8 de febrero. El objetivo es ayudar a los bebés que nacen prematuros y cuyas madres no pueden producir de forma adecuada un volumen de leche materna.
Paúl Gallardo, director médico del Hospital del Niño, Dr. José Renán Esquivel, explicó que este banco de leche beneficia actualmente a 120 infantes que están recluidos y cuyas madres no pueden producir el volumen de leche materna necesario para alimentarlos. Adicionalmente, ayudará a la población de bebés prematuros que recibe el nosocomio.
En la maternidad del Hospital Santo Tomás (HST) nacen cerca de 15 mil niños al año, de los cuales el 10% son prematuros y necesitan leche materna, detalló Gallardo.
Se estima que en Panamá solo el 28.1% de las mujeres amamantan a sus hijos de manera exclusiva hasta los primeros seis meses de vida.
A través de este banco de leche, se podrá recibir donaciones de las madres que están recluidas, así como de mujeres voluntarias que están lactando y que son externas al hospital.
Por medio de este banco y con los equipos tecnológicos, se llevará la leche a procesos de pasteurización de forma eficiente, reduciendo ampliamente la posible pérdida de nutrientes y conservando la leche materna. Para esto se cuenta con cuatro refrigeradores especiales.
Gallardo agregó que con este proceso de pasteurización se logrará identificar si existe algún tipo de infección o bacteria que pueda afectar la leche humana. “El objetivo es pasteurizar la leche humana para que se pueda utilizar con todos los niños prematuros y así ayudar a que tengan un desarrollo neurológico y cognitivo adecuado”.
María Teresa Moreno, encargada del Banco de Leche Humana, indicó que actualmente entre 60 y 70 madres hospitalizadas llegan a este lugar y utilizan los equipos de extracción, que son 8 máquinas en total. Una vez almacenada la leche, es procesada y refrigerada, y cuando el bebé lo requiera, es enviada a la sala de hospitalización para que se la puedan dar por sonda, vasitos o biberón, dependiendo de cómo deba alimentarse el bebé.
Moreno explicó que el procedimiento para aquellas madres lactantes externas que quieren donar su leche es acercarse a la fundación Lucy Tzanetatos, que está al costado de la urgencia del Hospital del Niño. Se les explica el proceso de donación, se les hace una historia clínica, se evalúa su vida social y se les practican pruebas serológicas para detectar enfermedades.
Una vez realizada la extracción de leche en el banco, se almacena refrigerada. Posteriormente se evalúa que no tenga ningún olor y se le hace prueba de crematocrito y acidez (que mide el contenido lipídico y calórico de la leche materna).
“Esa leche se coloca en frascos similares que posteriormente se colocan en la máquina de pasteurizar, donde se calienta, pasteuriza y luego se enfría de forma rápida. Después se le toma prueba de cultivo y si todo está bien, en 48 horas puede ser utilizada”, indicó Moreno.
En el país son insuficientes los espacios para que aquellas madres imposibilitadas de brindar un óptimo suministro de leche a sus bebés, por lo que este nuevo Banco de Leche Humana será de gran beneficio para cientos de recién nacidos.
El costo de este nuevo banco de leche oscila en los $200 mil; sin embargo, la mayoría fue donada a través de la embajada de la República de Turquía en Panamá y la Agencia Turca de Cooperación y Coordinación (TIKA), mientras que el Hospital del Niño realizó aportaciones como las adecuaciones a la infraestructura.
En la inauguración estuvo presente la viceministra de Salud, Ivette Berrío, representantes de la Agencia TIKA, Cuerpo de Voluntarias del Hospital del Niño, Fundación Infantil Ronald McDonald y Comité Auxiliar de Damas del Club Activo 20-30, Las Cumbres.