El Cuerpo de Bomberos de Panamá (CBP) enfrenta importantes retos y busca modernizar su operación. Tras 15 años sin modificaciones, se plantea una reforma a la normativa vigente: la Ley 10 del 16 de marzo de 2010, la cual busca actualizar aspectos legales, operativos y financieros.
Víctor Raúl Álvarez Villalobos, director general del Cuerpo de Bomberos de Panamá, explicó que estas modificaciones ya han sido conversadas y cuentan con el respaldo del Ministerio de Gobierno (Mingob) y del patronato de la institución.
Según la Ley 10, el patronato está integrado por representantes del Mingob, el Ministerio de Economía y Finanzas, el Ministerio de Vivienda y Ordenamiento Territorial y el Sistema Nacional de Protección Civil.
Además, incluye a un miembro designado por las compañías aseguradoras, un representante de la Sociedad Panameña de Ingenieros y Arquitectos, y otro de la Asociación Panameña de Ejecutivos de Empresa (Apede).
Según el director del CBP, existen necesidades urgentes dentro de la institución, como la adquisición de nuevos equipos, ya que hace más de una década no se compran tanqueros. Actualmente, se están destinando dos carros bomba a áreas estratégicas que apoyarán en las labores de los bomberos.
“Tenemos 15 años sin comprar un tanquero nuevo. Hoy en día estamos enfrentando una necesidad urgente, porque las emergencias no esperan y hay que atenderlas de manera correcta”, señaló el director del BCBP.
A inicio de este año, el patronato del CBP aprobó una inversión de $.36 millones, provenientes del presupuesto de inversión de la institución para el año, 2025, para financiar la adquisición de uniformes, vehículos, insumos, equipos y la remodelación de estructuras en varias estaciones a nivel nacional.
Con respecto al fideicomiso, Álvarez Villalobos explicó que se está analizando el uso del fondo administrado por la Caja de Ahorros, con el objetivo de optimizar el manejo de los recursos y fortalecer la institución.
La propuesta de reforma a la Ley 10 de 2010 incluirá mecanismos que permitan hacer más eficiente la inversión en infraestructura y equipos, garantizando una mejor respuesta ante emergencias.
Álvarez recordó que “el fideicomiso es un contrato realizado entre nuestra institución y la Caja de Ahorros, donde los fondos están regulados por un contrato que debe respetar las normativas. Eso es precisamente lo que también queremos revisar en la nueva reforma que planeamos presentar”.
Actualmente, las autoridades del CBP han sostenido conversaciones con la Caja de Ahorros, que ha mostrado total disposición para realizar los cambios necesarios y permitir que los bomberos puedan hacer un uso más eficiente y adecuado de estos fondos.
Las declaraciones del director del Cuerpo de Bomberos se dieron en el marco de un conversatorio con los medios de comunicación donde el objetivo fue fortalecer la comunicación institucional y cultivar relaciones más cercanas con la comunidad.