China, el gigante asiático vuelve a encender las alarmas con el brote de la enfermedad covid-19 causada por el coronavirus SARS-CoV-2, luego de eliminar en diciembre de 2022 las estrictas restricciones sanitarias aplicadas por casi tres años.
La situación genera preocupación por la falta de información y transparencia en torno a los contagios que se están reportando en este país.
La falta de datos creíbles por parte del gobierno chino es un inconveniente para determinar el tamaño y la gravedad del brote en el país más poblado del mundo.
La verdadera magnitud de las infecciones de coronavirus en China es actualmente “imposible” de rastrear, reconocieron a mediados de diciembre las autoridades sanitarias del país, que advirtieron de una rápida propagación tras el abandono de la política de “covid cero”.
Científicos y profesionales de la salud en Panamá coinciden en que el peligro radica en que aparezcan nuevas variantes del virus que resulten ser más resistentes a las vacunas actuales se propaguen en el mundo.
El pediatra, infectólogo e investigador clínico, Xavier Sáez Llorens, indicó que extraoficialmente parece ser un serio problema de salud pública, con enorme cantidad de hospitalizados y fallecidos, pero es difícil de precisar la situación por falta de transparencia del régimen asiático en revelar información fiable.
Además, añadió que la política de tolerancia cero a la covid-19, las herméticas, rigurosas y prolongadas medidas restrictivas, la pobre cobertura de vacunación completa (incluyendo terceras dosis y refuerzos) en adultos mayores, la utilización de vacunas inactivadas y la extensa circulación de subvariantes de Ómicron son los factores que han incidido en la inmensa oleada de casos.
Por su parte, el miembro distinguido del Sistema Nacional de Investigación de la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación, Paulino Vigil De Gracia indicó que los números oficiales de casos de covid-19 en China son extremadamente inferiores a datos obtenidos en la población, por ende no se puede ser preciso.
La gravedad está en que es un país de aproximadamente mil 400 millones de habitantes donde existía una política pública de “cero covid”, lo que implica poca o nula inmunidad natural y además usando vacunas menos efectivas, subrayó.
Vigil De Gracia remarcó que las variantes que están actualmente circulando en China ya están en gran parte del mundo. La preocupación radica en que surjan nuevas variantes, enfatizó.
En tanto, Jorge Luis Prosperi, especialista en salud pública y miembro del Consejo Consultivo de Salud, manifestó que el director de la Organización Mundial de la Salud (Tedros Adhanom Ghebreyesus) está solicitando a China que facilite “datos más rápidos, periódicos y fiables sobre hospitalizaciones y defunciones, así como una secuenciación vírica más completa y en tiempo real”.
Manifestó que las cifras que se están publicando actualmente en China no reflejan el verdadero impacto de la enfermedad en términos de ingresos hospitalarios, en términos de ingresos en unidades de cuidados intensivos y, sobre todo, en términos de muertes.
En ese sentido, el Centro de Control y Prevención de Enfermedades chino solamente ofrece cifras una vez por mes, luego de que China reabrió ayer domingo sus fronteras después de permanecer casi mil días selladas al mundo. Los viajeros procedentes del extranjero ya no tienen que hacer una cuarentena obligatoria en un hotel al llegar al país.
China ha reportado solo 15 muertes por covid-19 desde que comenzó a levantar las restricciones el 7 de diciembre pasado, y poco después redujo los criterios para determinar si una muerte fue causada por el coronavirus.
Medidas restrictivas
Varios países, como Estados Unidos, Australia y Canadá anunciaron la semana pasada la obligación de someter a prueba a quienes llegan desde China, dada su falta de transparencia con las cifras de contagios.
Marruecos fue más lejos y directamente prohibió la entrada en su territorio a todos los pasajeros procedentes de China a partir de hoy martes 3 de enero.
Mientras que las autoridades del vecino país Costa Rica exigirán a partir de hoy 9 de enero una prueba de covid-19 negativa a los viajeros procedentes de China, Taiwán, Macao y Hong Kong o que hayan estado en esos sitios durante los últimos 14 días, ante la ola de casos que se presenta actualmente en esas zonas.
En Panamá, el ministro de Salud, Luis Francisco Sucre, afirmó que por el momento no se impondrán restricciones a viajeros procedentes de China.
Sucre señaló que se han realizado reuniones sobre el tema y se ha decidido que en el país por el momento no habrá restricciones hacia estos pasajeros.
“Una de las variantes que está afectando a China es la BQ.1, la cual ya nosotros la tenemos aquí en la sexta ola, entonces no hay ninguna razón para que nosotros tengamos que bloquear o disminuir la entrada de estos pasajeros”, manifestó el titular de Salud.
El secretario Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación, Eduardo Ortega Barría, subrayó que la medidas de restricción a los pasajeros procedentes de China es para evitar la introducción de una nueva variante. “Pero realmente no sé si es una medida de salud pública o política”, acotó.
Subrayó que los países europeos donde han estado realizando pruebas a viajeros de China no han encontrado nuevas variantes y son las mismas variantes que actualmente están en circulación.
Las escenas que se están viviendo en el país asiático recuerdan a los días más negros del inicio de la pandemia cuando los pacientes abarrotaban los pasillos de los hospitales y las unidades de cuidados intensivos no daban a basto ante la avalancha de casos graves.