Tras una caminata que partió en los predios del parque Monumento a Las Madres de David, cientos de chiricanos y bocatoreños, en su mayoría vestidos de blancos, llegaron a las afueras del edificio de la Gobernación de Chiriquí para exigir una solución a la crisis que vive el país por los cierres.
Sobre todo porque son dos de las provincias más afectadas por los bloqueos de vías contra la minería.
Los manifestantes llegaron a la Gobernación solicitando la presencia del gobernador Juan Carlos Muñoz Franceschi, para expresarle sus quejas y que las lleve al presidente de la República, Laurentino Cortizo.
El mensaje más importante es que busque una solución a lo que todo el país vive, principalmente en esta región.
Marianth Sánchez, una de las participantes en la protesta, afirmó que si bien los cierres son un mecanismo de presión al Gobierno, estos solo están ahogando a la provincia de Chiriquí de dos maneras: “no nos llega el combustible y el gas para cocinar, entre otras situaciones más. Con esto quién o quiénes son los que están secuestrados”, preguntó.

Los participantes en la marcha afirmaron que a los veragüenses les llega combustible y gas butano y pueden seguir activos en todo, mientras que sus vecinos chiricanos no se pueden movilizar a otras provincias, sobre todo a la capital del país.
Portando pancartas para exigir el fin de los cierres, rechazar la minería y solicitar una solución a la crisis, los manifestantes esperan una respuesta pronto de las autoridades.
En la marcha pacífica participaron residentes de Chiriquí y Bocas del Toro, que es la otra provincia que está golpeada por los cierres.
Las personas expresaron que la libertad de tránsito está consagrada en la Constitución, que la población ya no aguanta más y le exige al Gobierno que cumpla con su deber constitucional de garantizar el libre tránsito.
“Con mucho respeto, mucha firmeza esta provincia no aguanta un día más”, expresó por su lado Enrique Athanasiadis
En tanto, el gobernador Juan Carlos Muñoz salió a a atender a los manifestantes e indicó que están conscientes de la situación que está viendo el país y la provincia de Chiriquí y en ese momento las personas empezaron a gritar “si no pueden solucionar, renuncia, renuncia…”.


