La falta de reactivos para pruebas de laboratorio clínico en la Caja de Seguro Social (CSS) ha desatado una crisis significativa bajo la administración de Enrique Lau Cortés.
La escasez de suministros ha forzado a pacientes a esperar que lleguen los reactivos, y algunos se encuentran en unidades de cuidados intensivos (UCI) del Complejo Hospitalario Dr. Arnulfo Arias Madrid con la angustia añadida de esperar pruebas esenciales como nitrógeno en orina, magnesio, calcio, entre otras.
En el Complejo Hospitalario, la desesperación de los familiares de los pacientes es evidente. Una madre de 58 años que ha estado esperando resultados cruciales para su hijo enfermo, comenta con voz entrecortada: “Mi hijo está en la UCI, y cada día sin estos exámenes es una tortura para nosotros. No sabemos si está recibiendo el tratamiento adecuado. Es una situación desesperante.”
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La situación se volvió aún más crítica cuando Promoción Médica, S.A. (Promed) presentó una demanda ante la Corte Suprema de Justicia (CSJ) el pasado 23 de agosto de 2024, pidiendo la nulidad de las Resoluciones No. DNC-230-2024-D.G. y No. DNC-231-2024-D.G., referente a la provisión de insumos.
La Prensa pudo conocer que la demanda está pendiente de admisión, y si es aceptada, se enviará el informe de conducta correspondiente y se esperará la decisión final de la Corte.
Este medio tuvo acceso a la Resolución No. DNC-230-2024-D.G., la cual resuelve administrativamente el contrato No.1000603068-0812-D.G., fechado el 26 de agosto de 2019, entre la CSS y Promed, para el suministro de pruebas de química general. Este contrato, que tenía un valor de $11,982,059.57 y debía abastecer a los centros de distribución de Panamá, Divisa y Chiriquí, ha sido rescindido, dejando a la CSS sin una fuente crucial de insumos.
En el hospital, el impacto de la escasez es visible. Un paciente que se sometió a una cirugía urgente, explicó que: “la falta de reactivos significa que tenemos que esperar mucho más para obtener resultados. Cada minuto cuenta cuando se trata de salud, y esto está poniendo en riesgo vidas.”
La CSS ha afirmado en un comunicado del 3 de septiembre que los servicios de laboratorio continúan operando en todas sus unidades, pero los problemas persisten en el Complejo Hospitalario, donde la escasez sigue afectando la atención de pacientes graves.
Médicos de la instalación, que prefieren permanecer en el anonimato, han señalado que la disputa entre el director de la CSS y la empresa proveedora de insumos parece estar beneficiando a otros proveedores, lo que les obliga a adquirir productos a precios elevados, afectando aún más los tiempos de atención.
El personal médico ha expresado su frustración, alegando que Lau Cortés canceló los contratos de mantenimiento de los equipos de laboratorio con empresas externas, dejando la responsabilidad a la CSS. Como resultado, las máquinas se han averiado y no han sido reparadas adecuadamente, complicando aún más la situación de los pacientes.
Un doctor, que pidió no ser identificado, añadió: “estamos luchando para hacer nuestro trabajo en medio de estas dificultades. La falta de insumos y el mal estado de los equipos hacen que cada día sea una batalla para proporcionar la atención que nuestros pacientes necesitan.”
La CSS y el proveedor se defienden
Según un comunicado de la CSS, el problema se atribuye al incumplimiento de la empresa proveedora, que no solo ha fallado en la entrega oportuna de los insumos, sino que también ha intentado aumentar los precios previamente pactados. La CSS asegura que ha tomado medidas administrativas para asegurar el suministro de productos conforme a la legislación vigente.
Por su parte, Promed sostiene que ha cumplido con todas las leyes de Panamá y con las entregas estipuladas en el contrato.
La empresa atribuye los problemas a la administración de la CSS, y afirma que las decisiones tomadas por Lau Cortés han causado retrasos y facilitado compras a proveedores con costos más altos, generando gastos innecesarios.
En medio de este conflicto, el impacto en la vida de los pacientes y el personal de salud sigue siendo una realidad cruda y dolorosa, reflejando la urgencia de una solución rápida y efectiva para garantizar la atención adecuada a quienes más lo necesitan.