La cuenta regresiva para que los representantes de 195 países del mundo se reúnan nuevamente por la mitigación del cambio climático, culminará mañana, lunes 30 de noviembre, cuando se dé inicio en París, Francia, a la Cumbre del Clima, llamada también Cumbre de Cambio Climático COP21.
El objetivo principal del encuentro global estará marcado por el consenso para un compromiso vinculante por la limitación del aumento de la temperatura global en menos de 2º C. y la reducción de emisiones contaminantes a la atmósfera, una de las principales causales del cambio climático.
A continuación, Rosilena Lindo, Jefa de la Unidad de Cambio Climático del Ministerio de Ambiente, da un pantallazo de lo que será el encuentro celebrado desde hace ya 20 años por las grandes potenciad mundiales, y en el que Panamá presentará la “Alianza de Países con Bosques Tropicales”, que busca que el rol de los bosques sea incluido en el acuerdo de París.
¿Qué se celebra a partir del 30 de noviembre y cuál es la importancia mundial que tiene el evento?
El 30 de noviembre se inicia la XXI Conferencia de las partes que han firmado y ratificado la Convención Marco de Naciones Unidas Sobre Cambio Climático, con la finalidad de construir la hoja de ruta para que la temperatura promedio global no aumente más de dos grados centígrados.
Este acuerdo logrará cambiar el modelo de desarrollo de los 196 países que se han unido para conseguir un balance en la concentración de gases de efecto invernadero, que permita la continuidad del desarrollo humano y mejor calidad de vida para las actuales y futuras generaciones.
¿Cuál será el objetivo de la Cumbre de Cambio Climático COP21?
El objetivo de la COP 21 es alcanzar un acuerdo vinculante que no solo limite el incremento de la temperatura, si no que defina las herramientas y mecanismos que tendrán a disposición los países, tanto en desarrollo como desarrollados, para lograr un desarrollo bajo en emisiones y que se adapte a los nuevos cambios en el clima.
Se espera que el acuerdo establezca los requerimientos mínimos de financiamiento, fortalecimiento de capacidades y transferencia de tecnología. Adicionalmente el acuerdo debe ser equitativo, y reflejar cómo todos y todas contribuirán a este reto de carácter mundial.
¿Cuál es el papel que desempeñará América, especialmente Panamá, en esta cumbre?
Latinoamérica está luchando por la educación en la gestión climática. Se busca asegurar que se provean las herramientas que faciliten a las nuevas y actuales generaciones contar con las herramientas y conocimientos necesarios para que piensen y actúen de forma sostenible.
Panamá lidera la alianza de los países con bosques tropicales, conformada por más de 50 países que buscan que el Acuerdo de París refleje el rol de los bosques y que se provean instrumentos financieros para complementar los esfuerzos nacionales en la lucha contra la deforestación y degradación en pro de la conservación y protección de nuestro más valioso activo natural.
Panamá reconoce que por medio de este mecanismo se puede disminuir la pobreza rural de nuestro país, así como la de los 52 países que han confiado esta tarea en las manos de la nación panameña.
¿Han sido efectivos y suficientes las medidas ejecutadas para mitigar el cambio climático?
Ciento cuarenta y siete países presentaron a Naciones Unidas sus esfuerzos para contribuir a la mitigación del cambio climático de forma nacional, y la suma de estos esfuerzos indicó que la temperatura podría aumentar entre 2.7 a 3.5 grados centígrados. Teniendo esto en consideración se espera el Acuerdo de París refleje una nivel mayor de ambición para alcanzar esa meta común. Aun así estos esfuerzos reflejan un mayor nivel de compromiso en reducir emisiones que lo acordado en el Protocolo de Kioto.
¿Qué fórmula se ha elegido para reemplazar al protocolo de Kioto en la lucha contra el cambio climático?
El Acuerdo de París es diferente al protocolo de Kioto en el cual solo los países desarrollados tenían la responsabilidad de reducir sus emisiones.
Gracias a la información científica actualizada que provee el panel intergubernamental de expertos sobre cambio climático, hoy el mundo sabe que este esfuerzo solo es posible en la medida en que todos contribuyan a este esfuerzo global, teniendo en cuenta que las capacidades para abordar este tema son diferentes, así como diferentes son los niveles de responsabilidad que comparten los países por la existencia del cambio climático.
Panamá ha generado pocas emisiones de gases de efecto invernadero, comparado con las emisiones de los países desarrollados. Y aun así, estamos comprometidos en asegurar que el acuerdo de París sea universal.
¿Será vinculante está fórmula?
Para el éxito de la enorme tarea de luchar contra este fenómeno global, el acuerdo debe ser vinculante.
¿De qué trata la llamada política del Fondo Verde para el clima?
El Fondo Verde del clima es el instrumento financiero de la Convención marco de Naciones Unidas Sobre Cambio Climático, creado con la finalidad de financiar proyectos en los países en desarrollo que contribuyan a la mitigación y adaptación al cambio climático de forma equitativa.
Actualmente cuenta con 10.2 billones de dólares y se espera que a partir de 2020 sea provisto con 100 mil millones de forma anual.
¿Habrá acuerdo en el protocolo de París? De no concretarlo, ¿cuáles serían sus repercusiones?
El Acuerdo de París es un acuerdo multilateral que permitirá adoptar un acuerdo global sobre cambio climático, legalmente vinculante y de aplicación universal, que potencie la ambición de todos los países, basado en sus respectivas capacidades y responsabilidades bajo la CMNUCC.
El mundo sabe que necesita este acuerdo para asegurar que el desarrollo sea sostenible, bajo en emisiones, y para todos.
Sin este acuerdo, estaríamos dejando pasar la última oportunidad para disminuir los impactos de los efectos adversos del cambio climático, lo que nos llevaría a altas pérdidas de la biodiversidad del planeta, disminución de los territorios en las zonas costeras, aumento de enfermedades asociadas al clima, así como un cambio significativo en nuestras costumbres y tradiciones asociadas al uso de los recursos naturales.