En medio de la creciente necesidad de fortalecer las capacidades de investigación biomédica y farmacéutica en la región, el Centro Regional de Innovación de Vacunas y Biofármacos (Crivb) de Panamá, en la Ciudad del Saber, un proyecto clave para el futuro de la ciencia y la salud pública, enfrenta retrasos imprevistos en su cronograma de construcción. Inicialmente programado para inaugurarse a finales de 2024, su apertura se ha aplazado debido a la demora en la aprobación de los planos, lo que ha afectado el avance de las obras.
Este ambicioso proyecto, impulsado por la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Senacyt), nació como una respuesta estratégica a las lecciones aprendidas durante la pandemia de covid-19. Su objetivo es fortalecer las capacidades nacionales en la investigación, desarrollo y producción de vacunas y biofármacos, posicionando a Panamá como un referente regional en innovación científica.
Con un costo estimado de $10 millones el Crivb contará con una infraestructura de última tecnología, equipada con laboratorios de vanguardia, mobiliario especializado y equipos de alta gama que permitirán realizar investigaciones de alto nivel.
Este centro no solo representa un avance en la ciencia nacional, sino que tiene el potencial de convertir a Panamá en un punto clave para la producción y distribución de vacunas en América Latina y el Caribe.
Así lo describió el secretario nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación, Eduardo Ortega Barría, quien atribuyó el retraso que el diseño del centro, realizado en colaboración con una firma de Houston, sufrió demoras significativas. A ello se sumaron los retrasos en la obtención de permisos, tanto de los bomberos como del municipio, para la demolición y remodelación del espacio, acotó.
Un proyecto con impacto global
El Crivb no solo cuenta con el apoyo local de instituciones clave como la Fundación Ciudad del Saber, el Instituto Conmemorativo Gorgas de Estudios de la Salud y el Instituto de Investigaciones Científicas de Alta Tecnología, sino que también ha logrado forjar alianzas internacionales para maximizar su impacto. El memorando de entendimiento firmado entre la Senacyt, el Instituto Internacional de Vacunas (IVI) de Corea y el Baylor College of Medicine de Texas (EE. UU.) establece una colaboración estratégica para fortalecer las capacidades de la ciencia de vacunas y la industria biofarmacéutica en Panamá y América Latina.
En su momento Jerome Kim, director general del IVI, indicó que esta alianza tripartita es un paso fundamental para transferir tecnología y formar recursos humanos en el campo de las vacunas. “Esperamos combinar la diversa gama de conocimientos entre nuestras organizaciones para desarrollar la fuerza laboral y la industria biofarmacéutica a través de la capacitación y los planes para futuras instalaciones de fabricación de vacunas en Panamá”, indicó Kim.
Para Panamá, este acuerdo abre una puerta única para formar a sus científicos en centros de alta tecnología en Corea y Estados Unidos, a la par que impulsa la investigación y producción de vacunas de relevancia para la salud pública, especialmente en el contexto de la lucha contra enfermedades infecciosas que afectan a la región.
Oportunidades para Panamá y la región
El Crivb no solo se perfila como un centro de innovación científica, sino también como un motor económico para la región. Su enfoque en la biotecnología y la producción de vacunas podría posicionar a Panamá como un centro de referencia en la fabricación y distribución de medicamentos vitales, no solo para el país, sino también para toda América Latina.
Además, el liderazgo femenino será clave en este proyecto. Como destacó Ortega Barría, el Crivb contará con tres científicas panameñas en sus primeros equipos de investigación, pero también se prevé la inclusión de investigadores internacionales, gracias a su naturaleza como Asociación de Interés Público (AIP), lo que permitirá la participación de expertos extranjeros.
A pesar de los retrasos imprevistos, el Crivb sigue siendo una de las grandes apuestas científicas de Panamá. Con el respaldo de alianzas internacionales y el compromiso de las autoridades locales, este centro promete transformar la investigación biomédica y abrir nuevas puertas para el desarrollo de vacunas y biofármacos esenciales para la salud pública en la región. Panamá está a punto de vivir una nueva era en la innovación científica y la industria de la salud, con el Crivb como la piedra angular de este futuro prometedor.
Datos de interés:
En Medellín, Colombia fue inaugurado hace dos años (junio de 2023) un laboratorio de vacunas y biofármacos a un costo de $54 millones. La diferencia es que Panamá tendrá un centro para realizar investigaciones y posteriormente se construirá la planta para producir vacunas y biofármacos.
En América Latina, Brasil y Argentina trabajan en el tema de vacunas hace varios años, pero no tienen la capacidad de exportación. De hecho, el Instituto Butantan de Brasil, tiene más de 120 años de tradición en la producción de vacunas y biológicos.