En el área de Villa Zaíta, corregimiento Ernesto Córdoba Campos, se han registrado dos muertes por atropello en una semana.
El primer incidente ocurrió el martes 22 de julio, cuando una señora de 76 años de edad, residente de la barriada Las Cumbrecitas, cruzaba una calle de cuatro vías en dirección al centro comercial y fue arrollada, muriendo en el lugar.
En menos de 48 horas, el jueves 25 de julio, otra mujer murió a tempranas horas de la mañana atropellada por una unidad de Metro Bus. Esta situación originó un tranque que se extendió desde Las Cumbres hasta Milla 9 y desde San Isidro hasta Milla 8 en la vía Transístmica, es decir, en ambos sentidos de la vía.
Además, los residentes de Las Cumbrecitas realizaron una concentración pacífica y pintaron un corazón azul sobre la calle para recordar la tragedia que sufrió su vecina el pasado martes.
Las autoridades están investigando ambos incidentes y gestionando la situación en la zona afectada por los trabajos que se realizan para ampliar la vía a seis carriles, luego de la inauguración de la estación del Metro de Panamá en Villa Zaíta.
No obstante, las autoridades del Tránsito y Transporte Terrestre en el área recomiendan a la población utilizar los pasos peatonales y puentes.
Una zona de trabajos
Recientemente, los residentes de tres comunidades ubicadas en Panamá Norte —San Andrés, Las Glorietas y Las Cumbrecitas— manifestaron a La Prensa que están cansados de lidiar con los trabajos de ampliación de la vía Transístmica, así como con las obras pendientes de la extensión de la línea 1 del Metro hacia Villa Zaíta.
Estos trabajos forman parte del proyecto de extensión de la línea 1 del Metro hacia Villa Zaíta, contratado por la empresa estatal Metro de Panamá S.A. a un costo global de $203 millones. De esta obra, el expresidente Laurentino Cortizo solo inauguró la estación de Villa Zaíta, y lo hizo 10 días antes de las elecciones del 5 de mayo.
En la comunidad Las Glorietas reside Candy Rodríguez. Ella cuenta que todos los días debe salir de la barriada al menos dos veces al día para dejar y recoger a sus hijos en la escuela República de la India. Explica que las inundaciones afectan a los niños de la escuela y a los adultos, ya que quedan mojados. Además, deben transitar por caminos de piedras y cruzar charcos de lodo.
Rodríguez denunció que no hay suficiente señalización en la obra y que por las noches los caminos no se ven. No hay pasos para cruzar, y deben caminar por un sendero estrecho al lado de la vía Transístmica, por donde pasan carros, mulas, buses y camiones a más de 60 kilómetros por hora.
