La unificación de las dos entidades que prestan servicios de atención de salud pública: Ministerio de Salud (Minsa) y Caja de Seguro Social (CSS) es un reto que se debe asumir como país.
El actual sistema de atención bicéfalo que tenemos nos hace ineficientes, se duplican costos, se generan dos políticas y estrategias de atención de salud diferentes, y así no se puede construir correctamente una estrategia de atención primaria de salud.
Así describió la situación del sistema de salud público, el exviceministro de Salud y presidente de la Junta Directiva de la CSS, Carlos Abadía, quien detalló que como país hemos fracasado en tener un sistema único de atención de salud, en estos 50 años, por querer mantener a las dos entidades de salud pública brindando atención de salud.
A juicio de Abadía, cada entidad debe tener su responsabilidad correspondiente. El Minsa como ente rector y la CSS como prestador único de atención de salud, dijo.
De hecho, un 84.4% de la población panameña recibe atención por parte de la CSS, según se desprende en un informe estadístico que maneja la institución.
Otro aspecto en el que se debe trabajar es que cada paciente tenga su médico de cabecera, pues hoy la atención de salud es espontánea, me siento mal , voy al médico, todo basado en la sintomatología.
En ese sentido, hay cero prevención, cero control del médico con el paciente, ni se puede evaluar al médico de manera objetiva, subrayó Abadía.
Los planteamientos de Abadía se dieron en la Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura de Panamá, donde se analizó el pilar del sistema de salud que es parte de la Agenda País 2019 – 2024.
Durante el evento, el especialista en salud pública y exrepresentante de la Organización Panamericana de la Salud, Jorge Luis Prosperi, manifestó que hay unos 11 desafíos identificados en el país para lograr transformar el sistema público de salud.
Entre ellos se encuentra superar la fragmentación del sistema de salud panameño; conformar una red integrada de servicios de salud, articulada por niveles de atención y grados de complejidad, con asignación necesaria y suficiente de recursos; fortalecer la capacidad gerencial y, en ocasiones, técnica, a nivel de los establecimientos del sistema de salud panameño; contratación y distribución equitativa de los recursos humanos; entre otros.
Subrayó que la reorientación de recursos de los sistemas de salud hacia la atención de pacientes de covid-19 ha dado lugar a la alteración prolongada de los servicios de salud básicos.
Las debilidades de nuestro sistema de salud siguen allí: falta de médicos especialistas, mora quirúrgica y carencia de equipo e insumos, así como la eterna escasez de medicamentos. Son los males de nunca acabar en hospitales de la CSS y el Minsa.
Aunque los expertos consideran que se han dado avances pequeños en algunos puntos, se debe actuar en beneficio de la salud de los panameños.
Por su parte, Marcela Galindo, presidente de la CCIAP, explicó que a través de estos encuentros y de la mano de expertos en cada pilar se revisarán las iniciativas propuestas por Agenda País 2019 – 2024. En esta oportunidad se examinó el pilar del sistema de salud.
“En abril de 2019, cuando realizamos el Debate Presidencial, sellamos esta iniciativa de monitoreo de Agenda País, hoy reafirmamos que continuaremos dando seguimiento a este compromiso por Panamá, porque no hacerlo condenará al país y a todos al fracaso”, agregó.
En el próximo foro de seguimiento se abordará el de educación de calidad.