La cifra de migrantes que cruzan el tapón del Darién sigue en aumento. Hasta el miércoles 23 de agosto las autoridades habían contabilizado el paso de 308 mil.
Es una cifra nunca antes registrada en la historia de Panamá. Cada año se reporta un alza de migrantes de varias nacionalidades que se arriesgan a cruzar la dura y espesa selva diarienita desde Colombia.
Por ejemplo, en todo el año 2022, cruzaron 248 mil personas.
La directora del Servicio Nacional de Migración, Samira Gozaine, y el director del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront), Jorge Gobea, confirmaron que en lo que va del 2023 ya el número es de 308 mil.
Incluso, proyectan que puede alcanzar el medio millón de personas al cerrar el año.
Ambos funcionarios hicieron este miércoles, ante el Consejo de Gabinete, una presentación actualizada de la situación migratoria en la que destacaron el recrudecimiento del flujo irregular de personas por la selva de Darién con sus efectos negativos en el ambiente, salud de la región y el estilo de vida de los grupos originarios.
Gobea señaló los efectos de la migración irregular en la seguridad ambiental, en la salud, así como en los cambios de estilo de vida de los indígenas, principalmente en las comunidades de Bajo Chiquito y Membrillo.