La Fundación MarViva se pronunció en un comunicado para rechazar un proyecto que plantea la construcción de una terminal portuaria de contenedores en Barú, provincia de Chiriquí, la cual es promovida por la empresa Marine Deep Port, S.A.
El gremio pide al Ministerio de Ambiente (MiAmbiente) rechazar el estudio de impacto ambiental (EIA) categoría III del proyecto, mismo que está siendo revisado por la dirección de Evaluación Ambiental de la institución.
MarViva, en un comunicado con fecha de este miércoles 27 de octubre, indica que el EIA presenta “debilidades” que fueron “identificadas por Fundación” y “presentadas a consideración de MiAmbiente durante el período de consulta pública”
El grupo ambiental también detalló que recibieron respuesta a sus argumentos por parte del consultor del EIA del proyecto, sin embargo estas respuestas “evidenciaron que el estudio, en efecto, carece de información clave para poder evaluar adecuadamente los impactos de un proyecto de esta magnitud y ubicación”.
Entre las debilidades del estudio planteadas por MarViva “está la necesidad de contar desde un primer momento con: un estudio detallado del fondo marino, acompañado de un completo estudio oceanográfico; un modelaje de la proyección de la dinámica litoral, considerando la estructura de 23 hectáreas a construir, más el muelle flotante, que demuestre el tipo y magnitud de la alteración que puedan sufrir las corrientes existentes en la zona”.
Además consideran que “no hay en el EIA información clara sobre el volumen del relleno a construir y la fuente de materiales para el patio de contenedores. Se carece también de un análisis de riesgos por tipo de carga; de un inventario de usuarios, especialmente los vinculados a las actividades pesqueras”.
“El EIA concluye que la variedad marina en la zonas es baja y que no hay especies en peligros de extinción, cuando en realidad, estudios en el área demuestran la existencia de una importante biodiversidad de peces (al menos 786 especies de peces se registran en el Golfo de Chiriquí, incluyendo muchas de valor comercial), así como de cetáceos (ballenas jorobadas, delfines manchados, entre otros)”, explica MarViva.
Este proyecto lo pretenden ubicar específicamente en Corotú, corregimiento de Limones, distrito de Barú, provincia de Chiriquí.
La obra incluye una plataforma de contenedores para el atraco de buques de gran calado (Triple E, Post Panamax).
Además, “se pretende construir sobre un relleno con elevación de fondo de 3 metros, aguas adentro. También se tiene proyectado la construcción de un muelle flotante, de unas 3 hectáreas, que se sostendrá por pilotes en el fondo marino, que se conectarán a tierra firme por dos puentes vehiculares de 20 metros de ancho”, señaló Mar Viva en su comunicado.
Tania Arosemena, gerente de Incidencia Política de la Fundación MarViva, expresó que “en los últimos años se ha otorgado la viabilidad ambiental a proyectos en zonas marino costeras sin una planificación integral que garantice una participación oportuna, libre e informada de los actores en dichas zonas” por esta razón pide “impulsar la implementación de medidas de planificación espacial marina, que coadyuven a mejorar la definición del tipo de desarrollo que requieren las zonas marinas costeras”.