El director general de Transporte Masivo de Panamá, S.A., administrador de Mi Bus, Carlos Sánchez Fábrega, anunció que para finales de año se contará con alrededor de 1,000 buses operativos, lo que estabilizará el servicio de transporte en la ciudad de Panamá y San Miguelito.
Se estima que para finales del año, cuando aumenten las movilizaciones de personas en las calles por las fiestas de fin de año, el sistema de transporte público de Mi Bus contará con alrededor de 1,000 metrobuses operativos, lo que estabilizará el servicio, destacó Sánchez Fábrega en el noticiero de Telemetro Reporta.
Según Mi Bus, se requieren al menos 1,200 buses en funcionamiento para cubrir de manera adecuada la demanda de pasajeros en el área metropolitana (distritos de Panamá y San Miguelito).
Por el momento, se mantienen operativas 815 unidades, de las cuales 200 buses fueron reparados en un periodo de 100 días, lo que ayudó a descongestionar un sistema de transporte que estaba colapsado.
De acuerdo con el gerente de Mi Bus, esto fue posible gracias a la renegociación con proveedores de repuestos, particularmente de aires acondicionados, desbloqueando contratos y asegurando más de un millón de dólares en repuestos.
Se informó que, de la pasada administración, se heredó una deuda de $51 millones en cuentas por pagar, lo que representa un tercio del presupuesto anual de Mi Bus. Incluso había proveedores a los que se les debía más de un año de pagos, especialmente proveedores críticos de repuestos.
“Se hizo una alianza de compromisos entre ellos y mi persona, y logramos romper los nudos de acceso a repuestos y de movilización. Creo que eso es lo que ha dado resultado”, destacó Sánchez Fábrega.
De las 1,436 unidades que tiene Mi Bus, hay 815 buses operativos. No obstante, se necesitan entre 1,000 y 1,200 unidades para alcanzar una estabilidad en la frecuencia y contar con el número adecuado de buses. La meta es tener metrobuses cada 10 a 15 minutos.
Actualmente, el reto que enfrenta el sistema de transporte masivo es atender la demanda de pasajeros en las horas pico. Por la mañana, el flujo principal entra a la ciudad, mientras que al final de la tarde, la mayor parte del flujo se dirige hacia las afueras. Por lo tanto, es necesario reforzar el servicio para quienes viajan en sentido contrario al tráfico.
“Para darle más frecuencia en la parte alta de la marea, tenemos que reducir la frecuencia en la parte baja. Entonces, aquellos que van en la dirección contraria al flujo pueden esperar entre 30 y 45 minutos, ya que estamos atendiendo la demanda en la otra dirección”, explicó el gerente de Mi Bus.
Para resolver esta situación, es necesario contar con suficientes buses para no castigar a los usuarios que viajan en sentido contrario y, al mismo tiempo, aumentar la frecuencia en las zonas de mayor demanda.
Con respecto a la movilización de pasajeros, ha habido una disminución de 620,000 personas diarias a solo 430,000, en parte debido a la falta de buses operativos y a la competencia de transportes informales.
La solución, ante las denuncias presentadas por la Asociación de Usuarios del Transporte Público, es aumentar la frecuencia de los buses para mejorar la eficiencia y reducir los tiempos de espera de los usuarios.
Luis Torres, vocero de la Asociación de Usuarios del Transporte Público, ha solicitado que se agilicen las reparaciones de los buses que están parados, además de que se habiliten nuevas rutas para salir del sistema de los buses denominados alternativos o piratas, que tanto afecta el bolsillo del panameño.