Un informe del Programa Nacional para el Control de la Tuberculosis del Ministerio de Salud (Minsa) revela que, en los primeros tres meses del año, se han registrado 401 casos preliminares de tuberculosis, una enfermedad infecciosa causada por la bacteria Mycobacterium tuberculosis, que suele afectar a los pulmones.
Este informe también reporta 15 defunciones en 2024, debido a esta enfermedad, que se transmite de una persona a otra a través de gotitas de aerosol suspendidas en el aire, expulsadas por personas con enfermedad pulmonar activa.
La provincia de Bocas del Toro, la comarca Guna Yala y el área de Panamá este continúan mostrando las tasas de incidencia más altas por cada 100,000 habitantes, una tendencia que se ha mantenido en los últimos años (2022 y 2023), según el documento.
Específicamente, Guna Yala reportó una tasa de 153.2 y 177.4, Bocas del Toro de 115.8 y 126.2, y Panamá Este de 93.8 y 111.2 casos por cada 100,000 habitantes en los dos últimos años, respectivamente. Sin embargo, es alentador observar un descenso en las tasas de incidencia en Colón y San Miguelito, de 45.0 a 40.2 y de 41.7 a 37.7 casos por cada 100,000 habitantes, respectivamente.
Edwin Aizpurúa, jefe de Control de Tuberculosis en el Minsa, detalló que en las zonas comarcales, factores como la desnutrición, la superpoblación en las viviendas, la alta prevalencia del VIH, así como el consumo de drogas, alcohol y tabaco, contribuyen al aumento de casos de tuberculosis.
Además, indicó que el área de Panamá este también registra casos entre las personas privadas de libertad, donde existen condiciones propicias para el desarrollo de la enfermedad, aunque se han implementado áreas de aislamiento para prevenir la propagación.
En Panamá, según los datos recopilados por el Departamento de Epidemiología del Minsa, en el año 2023 se reportaron 1,982 casos de tuberculosis, lo que representa 237 casos más en comparación con el año 2022, cuando la cifra fue de 1,745.
Interrupciones en los servicos
La pandemia de covid-19, transmitido por el virus SARS-CoV-2, causó interrupciones en los servicios de lucha contra la tuberculosis en 2021 y afectó especialmente a las actividades encaminadas a controlar la enfermedad, un escenario que fue advertido por especialistas como el presidente de la Organización Panameña Antituberculosa (OPAT), Amador Goodridge.
De hecho, en Panamá, un equipo de médicos del Hospital Manuel Amador Guerrero, enfermeras del Programa Nacional de la Tuberculosis en la provincia de Colón, junto al presidente de la OPAT e investigador del Instituto de Investigaciones Científicas y Servicios de Alta Tecnología (Indicasat-AIP), Amador Goodridge, publicaron en agosto de 2020, en la revista científica The American Journal of Tropical Medicine and Hygiene, la recuperación de covid-19 de pacientes con triple infección por Mycobacterium tuberculosis, VIH y SARS-CoV-2.
En el estudio se reportan dos de los tres casos de triple infección detectados por el Minsa los primeros meses de la pandemia, y aporta información a la teoría de que la coinfección con tuberculosis, VIH y SARS-CoV-2 no parece empeorar los resultados de la infección por Covid-19.
El primer caso documentado correspondío a un hombre de 29 años de edad que llegó al hospital a finales de marzo, y el segundo, a uno de 53 años que fue tratado a finales de abril.