CALIFORNIA, Estados Unidos (AP).- Por primera vez en años, los iPhones de Apple no fueron la estrella del espectáculo.La empresa reveló el martes un nuevo reloj de pulsera que busca poner muchas de las funciones de un teléfono multiusos en una pantalla más pequeña.
El reloj hizo su debut junto a un servicio que busca convertir los dispositivos móviles de Apple en un sistema de pagos que eliminará la necesidad de que los consumidores lleven dinero en efectivo o tarjetas de plástico a la caja registradora.
Apple Inc. también aprovechó la ocasión para presentar la siguiente generación de su iPhone: dos modelos de mayor tamaño que reflejan el intento de la compañía de alcanzar a rivales que han estado ganando adeptos con pantallas más grandes que le dan realce a los videos y a los juegos.
Se espera que los iPhones agrandados tengan una enorme demanda entre los fanáticos de Apple que han estado añorando una pantalla de más pulgadas, lo que prácticamente asegura que los nuevos modelos serán un bien muy codiciado este fin de año y durante la crucial temporada de compras navideñas.
Aunque se espera que el iPhone sea la principal fuente de ganancias de Apple en un futuro cercano, el nuevo reloj de pulsera fue la máxima atracción del espectáculo del martes.
La compañía de Cupertino efectuó la fiesta en el mismo auditorio del Valle del Silicio en el que Jobs develó la computadora Macintosh hace 30 años. De la misma forma en que la Mac convenció a más personas a adquirir computadoras personales por primera vez, Apple está convencida de que su nuevo reloj de pulsera se convertirá en un accesorio indispensable para las masas después de que salga a la venta a principios del año próximo.
El dispositivo también podría volverse un objeto que muestre qué tan bien está operando Apple bajo el mando de Cook. La compañía no ha ingresado a ningún mercado nuevo desde que Jobs falleció en octubre de 2011, lo cual ha generado interrogantes de que los poderes de innovación de Apple han estado menguando en la época de Cook.
Otras compañías ya venden smartwatches que han sido recibidos con indiferencia generalizada.Pero Apple tiene una reputación de despertar a mercados dormidos después de que modificó la dirección de la tecnología digital con el iPod, el iPhone y el iPad.
Los nuevos teléfonos no serán tan grandes como los más recientes de Samsung —el Galaxy S5 y el Note 4_, pero sí lo serán lo suficiente como para ayudar a neutralizar una ventaja clave de Samsung y otros fabricantes que usan el sistema operativo Android.
Apple dijo que sus nuevos iPhones van a ser más rápidos y tendrán una mayor duración de la batería que los previos. También contarán con un nuevo sensor, un barómetro, para calcular cuántas escaleras suben los usuarios, no sólo lo que caminan o corren.Donde haya mala recepción en la red celular, será posible hacer llamadas a través de Wi-Fi.
La resolución de la cámara se mantuvo en 8 megapíxeles, mientras que los rivales con Android y Windows la han incrementado al doble. Sin embargo, el número de megapíxeles es sólo un factor para lograr una buena fotografía. Apple dijo que está poniendo nuevos sensores para tomar mejores fotos.
Los teléfonos comenzarán a venderse el 19 de septiembre en Estados Unidos a un precio base de 199 dólares por el iPhone 6 de 16 gigabytes; 299 por el de 64 Gb y 399 por el de 128 Gb.
Los iPhone 6 Plus costarán 100 más en cada configuración.En cuanto a los smartwatchs, las compañías de productos electrónicos no han demostrado aún una necesidad real de relojes multiuso, y los brazaletes electrónicos han sido mayormente un producto de atractivo limitado para actividades de ejercicios.
El precio del Apple Watch comenzará en 349 dólares.