La precuela de una de las mejores películas de acción del siglo XXI, y la última iteración de una franquicia de casi 45 años, Furiosa de George Miller, nos transporta nuevamente al yermo de Mad Max. Esta vez de la mano de Anya Taylor-Joy como la protagonista epónima, en vez de Mel Gibson o Tom Hardy como el titular Max, Furiosa brinda secuencias de acción memorables, así como nuevos elementos narrativos que no estaban presentes en las anteriores películas de la franquicia.
Visualmente, Furiosa mantiene el mismo estilo visual de su antecesora Mad Max: Fury Road del 2015. Una escenografía única y convincente que transporta a la audiencia al desolador yermo de este universo, con sus caricaturescos pero perturbadores personajes. Con una estética denominada “Diesel-punk”, la película mantiene los elementos visuales de carros, vestimentas de cuero y metal, y la mugre del desierto que se volvieron tan icónicos con la trilogía original de Mel Gibson. En cuanto a las secuencias de acción, Furiosa es estupenda y extremadamente ambiciosa. Grabadas a alta velocidad, en gran parte sobre carros y camiones, con tomas que nos mantienen enganchados a la acción en todo momento. George Miller continúa demostrando, a sus 79 años, una visión única y brillante para las secuencias de acción.
La película es liderada por las actuaciones de Anya Taylor-Joy como la protagonista y Chris Hemsworth como el antagonista. Taylor-Joy es brillante y brinda una de sus actuaciones más físicas, efectivamente transmitiéndonos la naturaleza “matar o morir” del mundo. Por su parte, Hemsworth como antagonista es carismático y caricaturesco, pero escalofriante, dándonos una actuación que extrañamente evoca la personalidad y apariencia de quien fue alguna vez la estrella de la franquicia. El trabajo de ambos actores en lo que evidentemente son condiciones de producción difíciles es notable y digno de reconocimiento.
Donde Furiosa flaquea es en el aspecto narrativo, especialmente cuando lo comparamos con los elementos narrativos que se utilizaron en Fury Road hace 10 años. Esta película opta por utilizar la primera hora para construir el bizarro y grotesco mundo en el que transcurre la historia, y exponernos la motivación de la protagonista. Si bien esto refleja una visión creativa impresionante del director, es un golpe fuerte al ritmo y velocidad de la película, que de por sí dura dos horas y media. Esto es especialmente notable cuando lo comparamos con Fury Road, donde estos elementos narrativos se dejaban a la imaginación de la audiencia y la acción nos abrumaba desde el primer minuto. La construcción del mundo refleja la ambición del director y la productora de iniciar una franquicia cinematográfica que brinde más potencial que una película cada 10 años.
Furiosa es un paquete completo con algunas carencias. Si bien el ritmo y la narrativa de la película son carentes cuando se compara con Fury Road, la construcción del mundo es interesante y refleja la visión de un director ambicioso. En el rubro de la acción, Furiosa probablemente será de las producciones más resaltadas del año, con un sabor único que saciará a los fanáticos de la franquicia y entretendrá a los aficionados del cine de acción.
