Escrita por el compositor italiano Giuseppe Verdi (1813 - 1901) y estrenada en 1871, la ópera Aida narra una historia de amor y conflicto ambientada en el antiguo Egipto. La trama sigue a Aida, una princesa etíope capturada y esclavizada, quien se enamora de Radamés, un capitán egipcio comprometido con Amneris, la hija del faraón.
En el año 2000, esta ópera monumental, obtuvo nueva vida con el musical para Broadway llamado Elton John & Tim Rice’s Aida, producido por Disney Theatrical Group. Esta puesta en escena, catalogada por la revista Time como una de las 10 mejores producciones teatrales del año 2000, se está presentando en Panamá hasta el 21 de junio de este año en el Teatro Nacional.
Esta puesta en escena panameña, está bajo la dirección Artística de Aaron Zebede, Dirección de Orquesta del maestro Dino Nugent, Dirección Vocal y Diseño de Sonido de José Pepe Casis y Dirección Coreográfica de Maryelin Barahona. Contando con actuaciones de grandes actores como Janelle Davidson, Leonte Bordanea, Cristina de La Fuente.
“Mi personaje es Amneris: Princesa egipcia, hija del Faraón. Enamorada de su prometido Radamés”, dice Cristina de La Fuente en una entrevista para la prensa, describiendo a su persona como mimada en un ambiente de comodidades, desconectada de la realidad fuera del palacio. “Se hace pasar por una mujer superficial, pero nada es lo que aparenta ser…”
Para de La Fuente, en esta producción con orquesta en vivo y más de 80 artistas en escena, lo más desafiante de interpretar a Amneris, es “llevarla por las diferentes facetas del personaje. La transformación que se va percibiendo a medida que transcurre la obra”, confiesa de La Fuente, revelando que aunque como mencionó, se trata de un personaje aparentemente malcriada, conociéndola más a fondo ha logrado admirar cualidades en ella como su “nobleza y fortaleza en los momentos más desafiantes de su vida”.
Las funciones empiezan a las 8:00 p.m., y para de La Fuente es una obra que el público nacional debe aprovechar ir a ver primero, porque se trata de “una historia de amor de todas las épocas” y porque es una oportunidad para “sumergirse por un par de horas en un espectáculo que les hará vibrar cada fibra de su ser”.
