La gran noche del Museo de Arte Contemporáneo (MAC), es la noche de la subasta. Después de dos años de un duro confinamiento por la pandemia de la covid-19, el MAC realizará de manera presencial su subasta anual el próximo jueves 27 de octubre en el piso 19 del edificio Morgan & Morgan, en Costa del Este.
Se trata de un evento donde los interesados en el arte podrán pujar por los trabajos de más de 150 artistas. Hay de todo: escultura, pintura, fotografía, grabado, instalación, videos, arte digital. Obras de todas las épocas. Desde creaciones de los años sesenta y setenta, época en las que el museo tomaba forma, hasta creaciones terminadas en los últimos días. No se trata de una subasta más. Este año tiene una particularidad: coincide con la celebración de los sesenta años del museo, el experimento que vio la luz en 1962 bajo el nombre de Instituto Panameño de Arte. La subasta resume la anatomía del MAC: su esencia, su fortaleza, su institucionalidad, su conexión con la comunidad, su pasado, lo que es hoy, y el futuro. Sus ires y venires.
El curador
Sentado en un salón repleto de libros de arte, mientras recibe los destellos de luz de una lámpara blanca que cuelga de un techo de madera, Juan Canela, el curador jefe del MAC, habla sobre lo que implica este evento que podría considerarse como el más importante del mundo del arte en Panamá. “Cuando uno mira la historia del museo se da cuenta que realmente es impresionante la cantidad de cosas que han pasado. Los artistas que han pasado por acá, no solo panameños, sino latinoamericanos. La importancia que ha tenido este lugar para la difusión del arte y de la cultura en Panamá es importante. Siempre con muchos retos. Son 60 años de resiliencia. El museo está viviendo un momento muy bonito ahora mismo porque está en periodo de crecimiento institucional. Hace varios años la junta directiva decidió que quería que el museo diera un paso más allá y se convirtiera en un lugar con una institucionalidad más fuerte. Con un equipo, y unas formas de hacer más profesionales. Posicionarse mejor tanto en Panamá como en la región, y a nivel internacional, y eso es lo que se está haciendo en estos años”, narra. Y luego recuerda que en Panamá, no existen muchos espacios donde los artistas puedan mostrar, y sobre todo vender su obra. En efecto, en este país que encabeza las listas de crecimiento económico, con un canal que comunica dos océanos, y donde abundan los rascacielos, hay muy pocas galerías. El curador señala que en Panamá, hay coleccionistas pero el mercado local es pequeño. Entonces, la subasta con los años se ha convertido en un evento importante, no solo para el museo, sino también para los artistas locales.
El próximo jueves en un salón del edificio que aún está en construcción, con paredes y suelo de concreto, se subastarán trabajos de artistas de todas las generaciones. El 50% de la ganancia de las obras que se venderán serán para los autores, y el otro 50% será para el museo. Estos fondos se utilizarán para sufragar los programas del MAC.
Siete secciones
La puja tendrá siete secciones. La primera es Pioneros, que agrupa a grandes maestros del arte en Panamá que han estado presentes desde sus inicios. Allí hay trabajos de Antonio Alvarado, Coqui Calderón, Mario Calvit, Alberto Dutary, Sandra Eleta, Ignacio Esplá, Alfredo Sinclair, Guillermo Trujillo, Raúl Vásquez Sáez, Alicia Viteri, y Julio Zachrisson. “Son artistas que de alguna manera ponen las bases de lo que es arte contemporáneo en Panamá. Son esas generaciones bisagra entre lo que se entiende por lo moderno y luego lo que viene, el arte contemporáneo. Esa sección es un poco de homenaje al trabajo de esos artistas, y también a las personas que se ponen de acuerdo para lanzar lo que después se convierte en el museo”, cuenta el curador.
También está Memoria, que pone en contexto la importancia de comprender el pasado desde lugares críticos para poder construir un futuro mejor. Aquí se subastarán obras de Elsy Acosta, Brooke Alfaro, Nessim Bassam, José Castrellón, Isabel De Obaldía, George Scribner, Olga Sinclair, Arístides Ureña y Rodney Zelenka.
Construyendo comunidades, es otra de las secciones. Es un híbrido. Una especie de metáfora de ese germen que dio origen al museo. “Esta sección quiere agarrar ese espíritu de comunidad que había en el inicio del museo para mostrar artistas cuyos trabajos ya sea por la temática o la forma en que han sido realizados, aluden a esa idea de comunidad. José Braithwaite, Ana Sofía Camarga, Giana De Dier, Oswaldo De León Kantulé, Milko Delgado, Jonathan Harker, Lucio López Kansuet, Miguel Lombardo, Cisco Merel, Christian Pérez Vega y Risseth Yanguez.
Mientras que Identidades Deconstruidas, quiere incidir en las complejidades de la identidad panameña. “Es algo que ha estado muy presente durante la historia del museo, y sobre todo en los últimos años en muchas muestras. De cuando el contexto artístico se empieza a abrir a otras voces: las comunidades afro, indígenas, de las comunidades LGTBI (...)”, explica Canela. Los interesados podrán pujar por creaciones de Ramón Almanza, Megan Carrera-Raleigh, Barbara Cartier, Ana Elena Garuz, Enrique Jaramillo, Momo Magallón, Fernando Toledo, Braulio Matos, Lulu V. Molinares, Darién Montañez, Manuel Montilla, y Kojiro Takakuwa.
También está Futuros próximos, que tiene obras sobre arte digital. “En los últimos tiempos, sobre todo después de la pandemia, el arte digital ha tenido un boom. Es una locura (...)”, manifiesta el curador. Aquí se agrupan los trabajos de Miky Fábrega, Jorge Ledezma, Alfredo Martiz, Rosendo Merel, Alexander Wtges, María Camila Bernal, entre otros.
La sección Melting Pot trae trabajos de artistas internacionales representados por galerías locales. Aquí estarán obras de artistas de Argentina, El Salvador, Colombia, Venezuela, Cuba, entre otros países.
Por último, en Fijaciones, están las creaciones que no están en subasta. “Se venden a precio fijo y son más económicas”, explica Canela. Es el trabajo de tanto artistas jóvenes como establecidos pero, con obras más pequeñas “Es la forma de abrir un poco las posibilidades a gente que igual compra algo pero, que no tiene la capacidad de pagar por el precio de las obras que están en subasta”. Aquí las obras estarán entre $100 y $900.
Los precios
Es complejo hablar de precios en una subasta, pero para tener una idea, hay trabajos artísticos que podrían tener precios entre los $100 y $200 (las de Fijaciones) hasta las de artistas con larga trayectoria, que podrían costar una cifra que sobrepasa los $40 mil.
Aunque la subasta es el próximo jueves, las obras estarán expuestas desde hoy lunes 24 de octubre, en el edificio Morgan & Morgan. Esto con el propósito de que la gente pueda verlas con calma, sin prisa. Este formato se estrenó en 2021, año en que la subasta fue virtual (por la pandemia) pero, el público pudo ver las obras en vivo y en directo, unos días antes del evento.
