El prestigioso Premio Internacional de Narrativa Breve Ribera del Duero, ya tiene ganadora en esta su séptima edición: la escritora boliviana Liliana Colanzi (1981), autora de los libros de cuento Vacaciones permanentes y Nuestro mundo muerto, destaca, según el jurado, por una “gran originalidad y potencia expresiva” en su libro Ustedes brillan en lo oscuro, que publica para todo el mundo hispanoamericano la editorial Páginas de Espuma de Madrid.
Se trata de una colección de seis cuentos en los que la escritora boliviana construye una serie de espacios cerrados, densos en su atmósfera, inquietantes, a los que suma, como ella misma nos dice, “un interés por dislocar el tiempo, por entenderlo más allá de la corta vida humana: nos movemos por sedimentos históricos y geológicos que nos definen y que es posible escarbar y remover en la escritura”, lo que hace que se potencie en el lector una sensación de angustia y asombro al ver cómo seguimos enfrentándonos a los mismos miedos, cómo seguimos caminando sobre las mismas sombras.
Esas sombras y esos miedos que se pasean por los cuentos de Ustedes brillan en lo oscuro, son de índole muy diversa. Viejos demonios o energías contaminantes, enemigos íntimos o extraterrestres, del pasado más remoto o inmediatos, los cierto es que, en lo más profundo, seguimos temiendo igual de desesperanzados, necios que no hemos aprendido la lección. Los protagonistas de estos cuentos nos dejan la sensación de que algo no estamos haciendo bien, y que no somos capaces de cambiar nada a no ser que optemos por la lucha o por la huida, dos reacciones igual de liberadoras del miedo según se mire.
Una cueva por la que pasan los siglos; una ciudad futurista en pie de guerra en la que sigue habiendo ricos, pobres y evangelistas; un viaje a un pueblo; un cumpleaños y un deseo; una comuna religiosa; un accidente radiológico: estas minúsculas pinceladas sobre las que se abren los espacios en los que ocurren los cuentos, es lo que fascina. Ese manejo de la construcción de escenarios en apariencia tan abiertos, y que en el transcurso del cuento se hacen agobiantes, es uno de los grandes aciertos de Liliana Colanzi.
Y como dijimos, el trastoque del tiempo, su dislocación, la intencionalidad en el trabajo de romper el discurso temporal para llevarnos por las historias; el diálogo directo entre los personajes, la belleza telegráfica de las descripciones que dibujan con precisión lo que ocurre (noten: “La lluvia cae en gotas gordas y escandalosas que aporrean los tejados. El cielo chispea sobre el descampado como un cuchillo frotado contra una piedra de afilar y la luna es apenas una rajita de plata asomando entre las masas de nubes eléctricas”), dinamizan el tiempo, nos lleva sin dilaciones ni adornos hacia el centro del cuento.
De las seis historias, me quedo con El camino angosto, cuyos protagonistas viven en una comuna religiosa que recuerda a las peores pesadillas sectarias de nuestra historia reciente. Los sofisticados sistemas de vigilancia de la feligresía no son capaces de esconder a los mayores enemigos de nuestra libertad: nosotros mismos, la fe depositada en el lugar equivocado, y el miedo terrible a saltar la valla hacia la libertad de pensamiento. Una pesadilla brillantemente contada, una metáfora de nuestro tiempo más allá del hecho puramente religioso.
Si no han leído a Liliana Colanzi empiecen por este maravilloso libro, y busquen y sigan a esta autora de cuentos que va a dar mucho que leer y de lo que hablar. La reflexión que sigue a la lectura de sus cuentos es muy estimulante y una lección de escritura de cuentos (Colanzi enseña escritura creativa y literatura latinoamericana en la Universidad de Cornell), lo que siempre es un valor añadido para los lectores que quieran escribir.
Los mundos de sombra y de extrañeza de Ustedes brillan en lo oscuro, van a conseguir que regresen al cuento con energías renovadas. Es sin duda, un libro que viene a dar otra vuelta de tuerca al panorama narrativo de nuestras letras, y a reforzar la muy estimulante racha de excelentes cuentistas que siguen confirmando la buena salud del género en nuestro continente. Un excelente libro y una autora que haremos bien en no perdernos.