Se amplía la lista de quienes no pueden ir a idolatrar a Mickey/Minnie, nonagenarios. Muchos pueden codearse con esos ratones tanto en sus sedes de Florida y de Calidonia. Quien tiene miedo de avión que no lo aborde.
Quienes dispongan de recursos y no tengan estómago para ir de deporte a matar elefantes a África, que lo permite la ley, pueden inscribirse en una compañía de turismo rumbo al Titanic y embarcarse en Canadá (Terranova) en un sumergible del tipo Titán.
¿Se equivoca el Ejecutivo, así como la justicia estadounidense con la designación de corruptos del patio limoso y el no? ¿Es el imperialismo en acción, el de EUA, del que somos expertos, como buena parte de Latinoamérica? Puerto Rico también es Latinoamérica. ¿Le pasan factura a Varela por su principal y encomiable obra -y casi única-, la ruptura con Taiwán/establecimiento de relaciones con China?
En La Cresta, en una sala de la residencia oficial de la Embajada EUA, sellaron en 2008 Varela y Martinelli su matrimonio político. Ni siquiera pueden pisar esa sala histórica estos egresados de postgrados en universidades del Imperio.
(Señora Mari Carmen, invitarlos en ese lugar a un cafecito, por el amor de Dios).
Nosotros, el 99% de los panameños y más, no nos rendimos. Queremos un futuro mejor, y luchamos por borrar la impunidad, aunque la justicia patria mire para otro lado. Ha sido el poder político/económico el constructor de ese sistema invencible…contra el ladrón de gallina ni siquiera Guinea, sino criolla ponedora.
La etiqueta de Primer Mundo, para otros, es mentolátum, no obstante hay prácticas cotidianas de quinto mundo. El latrocinio y la impunidad nos han superado. “Siempre ha habido ladrones, maquiavelos y estafaos, contentos y amargaos…”. Pónganse contentos, no amargados…Sin amargura de chofer de funeraria.
El accionar político y la gestión pública son deprimentes (póngale atención a qué hay debajo de la locuacidad del candidato oficialista). Una buena parte de la sociedad se baña sin ningún remordimiento en la playa del clientelismo, y ofrece lecciones, y nutre de ideas y argumentos a los politicastros/as. Si en nuestro país, visita esa playa el 30% puede ganar el clientelismo. ¿O es más? ¿Qué crees?
“Adhemar rouba, mais faz”, es la consigna de un político brasileño, Adhemar de Barros, quien alardea de la frase acuñada por un adversario político. En el Sao Paulo de mitad del siglo pasado. Cobra vida en el Panamá contemporáneo de sobrecostos, enriquecimientos no justificados, peculados, comisiones ilegales, coimas, mordeduras, ñamería, mordidas, costos de pandemia y bates a precio de lingote de oro. Señora Justicia, aplique el código de enriquecimiento injustificado a un montón de gente. Hágalo y le echo un cuento. (Echo, de echar, lanzar; no hecho).
Contra corrupción, contra la impunidad.
Me mata el jazz. Danilo Pérez, Idania Dowman, hija de calipsonian bocatoreño y alumna de primera fila de las geniales Bárbara y Marta Estela. La palomita titibú interpretada por Osvaldo. Y el extranjero, de Caetano Veloso. Y Pink Floyd, británica banda rockera psicodélica, que presagiaba que la masa estaría ‘confortablemente adormecida’, y no se percataría de que algo bueno se está moviendo.
El autor es docente, periodista y filólogo