El documental Mucho mucho Amor de 2020, disponible en Netflix, nos cuenta la historia de Walter Mercado, el famoso astrólogo puertorriqueño que llegó a convertirse en una figura casi universal de la cultura latina, y el legado que deja después de su muerte en 2019.
Dirigida por Cristian Costantini y Kareem Tabsch, el documental hace un efectivo trabajo de capturar la mística en torno a esta interesante figura. Con un efectivo trabajo de investigación y entrevistas, repasamos distintas etapas en la vida de Walter Mercado, desde su ascenso a la fama en la década de los años 1970, su periodo como super estrella continental y el ocaso de su vida, donde se analiza su legado cultural.
La película logra capturar de forma magistral el aura de misticismo y carisma que caracterizan al icónico astrólogo. La estética de su vestimenta, su cautivadora presencia y el contenido de sus mensajes, lo cuales lo hicieron trascender de una estrella televisiva a una figura casi universal. Una persona con una personalidad enorme, y una presencia única, es fácil entender que Walter Mercado era más que solo una persona en la televisión, pues se convertía en una presencia que transportaba a la audiencia por 60 minutos. La película dimensiona su inmenso éxito y al mismo tiempo nos reconecta con la experiencia relacionable de verlo en la televisión durante nuestra juventud, la cual se extiende por toda Latinoamérica.
A pesar de tratarse de un astrólogo, y que la película recae varias veces en imágenes y estéticas de Tarot, el mensaje de Walter Mercado estaba fuertemente arraigado en el positivismo y la creencia de que “el mañana será mejor”.
La película alude a esta cualidad como el secreto de su éxito, una cualidad que nace desde la propia personalidad de Walter, una persona optimista y generosa. Sus enseñanzas no buscaban aferrarse a un dogma religioso y filosófico, sino únicamente esparcir paz, felicidad y amor.
Al deconstruir su mensaje de esta forma, es fácil entender cómo la cultura latinoamericana se identifica con una persona tan llamativa y cautivadora, que aparte les brinda optimismo y positivismo sobre el mañana.
Al explorar el legado de Walter Mercado, vemos que gran parte de su éxito con las generaciones más jóvenes se debe a su estética andrógina y la ambivalencia de género que lo rodea. Similar a otras estrellas conocidas por su forma tan extravagante e idiosincrática, como Liberace y Elvis, Walter Mercado es llamativo por ser visualmente tan diferente. La forma en la que difumina las normas de género lo convierte en una figura referencial para una generación que valora la expresión de identidad sexual y de género.
La figura de Walter Mercado es una que se extiende más allá del mundo de la astrología, convirtiéndose en una referencia cultural. Mucho mucho Amor enaltece a una personalidad reconocible, única y sensacional, que durante gran parte de su vida esparció positividad y felicidad.
