Némula no se guarda nada. En sus temas habla de los múltiples altibajos de su historia personal: caerse, levantarse y seguir adelante. Es decir, de la vida misma.
Precisamente una de sus más recientes canciones, Rehab, es una metáfora de lo que supone el sufrimiento por una adicción. Es un sencillo musical basado en la experiencia que tuvo el artista cuando decidió ayudar a un ser querido atrapado en el laberinto del consumo habitual de drogas.
Rehab es el cuarto sencillo de los ocho temas que componen el segundo disco como solista del cantante y compositor panameño Gianfranco Alessandria, conocido como Némula, que será lanzado a principios de 2023. Se trata del álbum Bailes Raros, una especie de catarsis del artista.
“Es la canción más diferente. Es la más suave de todo el disco y tiene base en el reggaetón y la percusión. Esta canción me abrió un poco el espectro en el sentido de que yo también puedo hacer otro tipo de cosas. Yo digo que es un reggaetón psicodélico, porque tiene un poco de eso, pero también tiene la melodía de los sintetizadores y de la guitarra. Pienso que hoy en día la música popular está mutando. El género urbano está mutando al pop y el pop, más o menos, al rock alternativo. Eso es algo muy bueno para nosotros en este momento”, dijo.
Este tema musical supone una apuesta por una retroalimentación entre el artista y el público en el que se ofrece parte del mensaje para que los fanáticos, por sí mismos, descubran la razón de ser detrás de esa canción.
El nombre del disco Bailes Raros se remonta a cuando Némula, en reuniones con amigos y familiares, ponía algunas de sus canciones, que todavía no habían sido lanzadas al público, con la idea de ver la reacción de la gente. Así se percataba que sus amigos empezaban a bailar de un modo triste, angustiado y melancólico, en una mezcla de emociones que se fundía entre la alegría y la felicidad. “Todo ello desembocaba en un baile raro. Lo raro precisamente es lo que la persona está pensando mientras está bailando”, dijo.
El compromiso de Némula con su público es un elemento que se pone a toda prueba. Un ejemplo de ello fue que sucedió el pasado 7 de octubre cuando tuvo lugar su más reciente espectáculo de 2022 en el local El Sótano. Mientras tocaba la segunda canción empezó a sentir una molestia en su oído derecho. El caucho de uno los audífonos especiales que utiliza, los conocidos como In Ears, se alojó en su oído tan profundo, que le tocó el mismo tímpano. Sin embargo, aguantó las molestias que se tradujeron en un dolor que se extendió a la mandíbula. Justo después de terminar el show de once canciones corrió de inmediato al hospital y, afortunadamente, no le sucedió nada grave.
“Cuando siento el dolor, inmediatamente paré de cantar, porque en principio pensé que se había apagado la voz del sonido y yo le dije al chico de sonido: ‘Hey, dile al sonidista que se me apagó la voz’ y este me hizo una seña para indicarme que mi voz estaba sonando y era que se me había metido el caucho tan adentro en el oído que no podía escuchar nada”, rememoró.
Luego subió el volumen del audífono para su oído izquierdo, mejoró el sonido y siguió cantando. El dolor aumentaba cada vez más. “Ya estaba incómodo y me puse nervioso sobre qué era lo que iba a pasar conmigo y, en algún momento, llegué a perder el equilibrio. Cuando terminó el show, pedí una pinza en el bar para que me lo sacaron, pero cuando alumbraron la zona del oído se percataron que estaba muy metido adentro”, relató.
Otros de los temas más recientes Cicatriz, Géminis e Hijos de la Luna son un libro abierto del artista respecto a su historia personal. En el caso de Cicatriz revela sentimientos de rabia y describe la sensación similar a la de “escupirlo todo”, de haberse tirado encima un balde de agua caliente hirviendo.
“En mis canciones narro situaciones de mi vida personal como lo fue la separación que tuve con la madre de mi hija y la frustración de no ver a mi hija todos los días. Son los altibajos de la vida”, agregó.
Hijos de la Luna, en cambio, se refiere a un grupo de amigos que no abandona al otro y lo acompaña en los momentos buenos y malos. El elemento nocturno que alude el nombre de la canción rememora esas reuniones y fiestas de madrugada con sus amistades.
Géminis, en tanto, refleja la naturaleza de ese signo zodiacal y las emociones que se manifiestan con ello.
