CON MIRAS A LAS ELECCIONES.
Carlos Herrera Morán Opinion@prensa.com | Hace 17 añosLos informes oficiales del Gobierno dan cuenta de que en los últimos años y, en especial, a partir de las reformas fiscales y de la ley de la Caja de Seguro Social, mismas que se promulgaron en 2005, el país ha experimentado un crecimiento económico (relativo, según algunos especialistas en la materia), el cual –se dice– alcanza el 11.2%, lo que –evidentemente– representa un crecimiento admirable y envidiable, en comparación con otros años y con otras administraciones gubernamentales, circunstancia ésta que –según declaraciones del Gobierno– ha disminuido en un 7.7% el desempleo en el país. Lo anterior debería –lógicamente– traducirse en un mejoramiento en las condiciones sociales y económicas de la mayoría de los panameños, así como en la capacidad de respuestas efectivas del Gobierno a los graves y grandes problemas que presenta el país en materia de salud, educación, transporte, seguridad social, etc. Sin embargo, ello no ha sido así, muy por el contrario, la calidad de los servicios públicos estatales ha decaído sustancialmente y, además, se pronostica que la situación económica de la mayoría de los panameños irá empeorando día tras día